Resumen: Para convertir la presión acústica en una señal eléctrica, los micrófonos de medición utilizan un delicado diafragma metálico estirado a través de una placa posterior con un espacio muy estrecho entre ellos, formando un condensador. El sonido que se capta desvía el diafragma, y la variación de la distancia a la placa posterior produce un cambio en la geometría del condensador, lo que genera una señal eléctrica proporcional a la presión del sonido...